Jeanne Paquin abrió su boutique en la parisina calle de la Paix en 1891. Se la considera la artífice del negocio de alta costura moderna, ya que supo promocionar como nadie sus creaciones: entre otros métodos de difusión, enviaba modelos vestidas con sus diseños a la ópera, las carreras u otros eventos sociales, a fin de que fuesen admiradas y llamasen la atención de posibles clientas.
También se cubrían con mantones de encaje o cachemira, o sobretodos como mantos, mantelets, paletones o capas Tudor. Por otro lado, surgió el concepto de masstige -de mass production (producción en masa) y prestige (prestigio)-, productos considerados de lujo pero a precios asequibles, una línea desarrollada por diseñadores como Alexander Wang, Tory Burch, Philip Lim, Thakoon Panichgul y Olivier Theyskens.
Ameriquinha, que se llevó el torneo de la ciudad. En la espalda, a la altura de la nuca, aparece como detalle una palmera, ya que es el símbolo del país. Participó en varios encuentros de despedida, como la despedida de Franz Beckenbauer del Cosmos en 1984, la celebración de su cumpleaños 50 en San Siro en 1990 y un encuentro en 1984 entre la plantilla del Cosmos de ese año y un equipo de All-Stars del Cosmos.
