En 1994 fue nombrado asesor ejecutivo en el Santos, para luego ese mismo año ser nombrado Ministro de Deportes, aunque con muchas dificultades debido a la falta de apoyo de la clase política, se promulgó en Brasil la «Ley Pelé», la cual promulga que en cuanto se acaba el contrato de un jugador con su club, debe renovar con este, o el club debe dejarlo en libertad. Andrada no quería sufrir el gol de Pelé porque pensaba que dejaría de ser conocido como un buen arquero y pasaría a ser recordado solamente como el arquero del milésimo gol.
Categorías